Dr. Luis Cobo

Angiología y Cirugía Vascular

Podólogo de origen. Cirujano vascular por vocación. Mi compromiso: escuchar, explicar y actuar con precisión.

10+

Años de Experiencia

1,000+

Pacientes Tratados

Mi práctica se centra especialmente en

Isquemia crítica y arteriopatía diabética

Tratamiento especializado de la enfermedad arterial periférica avanzada y complicaciones vasculares en pacientes diabéticos, enfocándome en la prevención de amputaciones y mejora de la calidad de vida.

Revascularización distal y salvamento de extremidades

Técnicas avanzadas de cirugía endovascular y abierta para restaurar el flujo sanguíneo en extremidades afectadas, preservando la funcionalidad y evitando la pérdida de miembros.

Estenosis carotídea y prevención del ictus

Diagnóstico y tratamiento de la enfermedad carotídea para prevenir accidentes cerebrovasculares, utilizando técnicas mínimamente invasivas cuando es posible.

Patología aórtica

Manejo integral de aneurismas aórticos y otras patologías de la aorta, incluyendo tratamiento endovascular (EVAR) y cirugía abierta según las necesidades de cada paciente.

Enfermedad venosa y úlceras crónicas

Tratamiento completo de la insuficiencia venosa crónica, varices y úlceras venosas, utilizando técnicas modernas como láser endovenoso, escleroterapia y cirugía mínimamente invasiva.

Accesos vasculares para hemodiálisis

Creación y mantenimiento de fístulas arteriovenosas y catéteres para pacientes en diálisis, con seguimiento activo y cirugía de revisión cuando es necesario.

Además de la práctica clínica, mantengo un interés profundo en investigación e innovación. He participado en múltiples estudios y capítulos de libro sobre patología arterial, venosa y pie diabético, y actualmente finalizo un Máster en Inteligencia Artificial Aplicada a la Salud, donde desarrollo herramientas basadas en IoMT, visión computacional y modelos predictivos.

Mi objetivo es claro: aprovechar la tecnología para identificar riesgos antes de que el paciente sufra una complicación mayor, mejorar la toma de decisiones y elevar el estándar del diagnóstico vascular.

Cada paciente merece claridad, honestidad y una estrategia bien diseñada. Y, sobre todo, merece llegar a tiempo.

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